Los días son tan largos sin ti
el tiempo tan perdido y tan cansado
mi alma tan vagabunda
mis ojos descontrolados igual
que un silencio en medio de tantos
ruidos; como un pájaro ciego.
Tengo mil flores brillando en tu espera
y tengo una mano muerta por ti.
Me dueles.
Hablé con la mañana y me dijo
que es el alma de tu sonrisa
hablé con dios y me dijo
que eres la ternura de su mano
hablé con la noche
y no me dijo nada de ti.
Diariamente te extraño.
Los días están felices, los montes húmedos
la tierra ardiente, mis brazos te
piensan
cada segundo de no estar cerca
es una lápida
cayendo a mis hombros
cada pedazo de
nube que no vemos juntos
es un golpe,
una lágrima
un beso no
correspondido.
Me siento como tierra
seca.
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