viernes, 6 de septiembre de 2013

El hombre

Para Marcos.
I
El hombre está callado.

El hombre tiene la mirada al aire
y el corazón al suelo.
Todo movimiento pierde su sentido.

¿De qué glaciar robaron hielo
y entre mis huesos lo incrustaron?
Aves estúpidas con pico
¿Para qué?
Para nada.

Estoy convencido de que estará mejor arriba
o dondequiera que se encuentre el cielo,
pero esos nueve meses ¿a dónde se van?
¿quién los duerme y los arrulla?
No puedo creer que su destino fuese
ser enterrados en ese suelo
lleno de muertos,
en esa tierra regada por lágrimas y
sembrada por cruces y mármoles fríos,
dura tierra sobre tierra blanda
tierra sobre tierra.

El hombre está enojado y llora.

La muerte es un paso más en la vida
pero ¿quién lo va a creer?

II
El hombre resiste a la tristeza
pariendo sonrisas.

El hombre sabe, aprende,
se mueve, amanece;
que tiempo hay de sobra para amar
cuando así se quiere.

Día con día se va donando al mundo.

El hombre piensa en el futuro detenidamente
y a lo lejos,
llana cual sendero,
mira a una semilla que florece
mientras él se abraza a su mujer.

El hombre está callado

pero hay dos sonriendo.

1 comentario:

  1. Mil gracias, David, porque lo leo y vuelvo a sentir la emoción, hoy a 15 días de cumplir 23 años de ese vivir.

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